Municipio
de enorme importancia en tiempos de la reconquista, en los
que la villa era ciudad fronteriza. Fue merecedora de privilegios
por su participación en la conquista de Baeza en el
año 1227, ratificados después por Alfonso XI
durante la lucha en la batalla del Salado, y que perdió Carlos
I al posicionarse en el bando comunero.
Su situación como
vía romana hacia Cantabria dejó numerosos vestigios
artísticos en Cervera de Pisuerga (casonas, escudos,
monumentos, plazas).

Primitivamente se llamaba
Cervaria, por los muchos ciervos que poblaban sus bosques.
En el siglo IX es repoblada por dos monjes lebanienses y anexionada
a uno de sus monasterios. Como ciudad fronteriza, es defendida
por las fortalezas de Vallejera, Peña Barrio, Peñas
Negras y El Castillo. Señorío de los Condes de
Siruela durante varios siglos y antigua cabeza de la merindad
del Condado de Pernía, es en la actualidad cabecera
de Partido Judicial. |